8.12.10

Adolescencia


Uff. No sé si estoy saliendo o comenzando o a la mitad de la etapa.

Es igual de hueviado o más que antes; aunque quizás me parezca más, porque, como dicen, el pasado siempre fue mejor.

Adolescencia..., ¿qué se supone que viene con ella?

Los amores, la inmaduración y maduración gradualmente, las espinillas, los pelos extras, las creciditas en ciertos lugares... El cambio.

¿Amores? Sí, están. Mi maduración aún no termina y me falta harto (según yo). Las espinillas..., no quiero hablar de eso. Ni mencionar los pelos, que menos creo que sea interesante leer de ellos. ¿Creciditas? Cualquiera a un kilómetro de distancia podría notarlas.

El cambio. Sí.

Lo que no entiendo es por qué nos llaman adolescentes, si adolescente viene de adolescer (que no duele) y yo creo que esta es una de las etapas que más marcan en la vida. Lloras mucho, ríes mucho, amas mucho, sufres mucho... ¿Hola? ¡Todo eso DUELE!

Quizás hayan dolores que se sientan buenos, como el amor (sé que suena masoquista, pero es la verdad). Cuando extrañas a esa persona y te duele no estar con ella, pero no importa, sabes que la volverás a ver. También está cuando te ríes mucho; joder, es como si bajaras AL MENOS cinco kilos con tanta risa.

Y los dolores malos... De esos hay bastantes. Cuando no te corresponden, cuando te sientes incomprendido, cuando te retan, cuando no te pescan, cuando... uuuff.

Difícil, pero no imposible. Definitivamente, te echaré de menos adolescencia; a ti y a todos los co-protagonistas.

14.6.10

Chau papá, me voy.

Me gustaría poder partirme en dos y hacer feliz a todas las partes. Me gustaría no hacer sufrir con mi decisión. Me gustaría que entendieras el por qué, que dejaras las cosas fluir. No quiero hacerte mal, nunca he querido que estés mal; pero simplemente no puedo estar contigo siendo que no entiendes lo que siento.

Simplemente quiero que me quieras, que me aceptes como soy. No que esperes grandes cosas de mí, ni que consideres lo que hago como más importante que yo. Quiero..., no, necesito que me des amor. Que me demuestres que aquel incondicional amor, sigue ahí; que a pesar de que me vaya mal, tú me seguirás queriendo. Sé que esperas grandes cosas de mí, por lo que no soporto la idea de decepcionarte; y aún hay veces en que me pregunto si seré tan genial como crees que soy, si daré lo que esperas de mí. Siempre he creído que crees que lo que hago, es más importante que como me siento, que como soy como persona. Hace años que creo que si fallo, te molestarás y tu amor flaqueará. Sólo quiero que seamos felices, que compartamos, que riámos..., un abrazo.

Si me voy, no es porque no quiera saber de ti, ni porque no quiera hablarte. Sólo quiero darnos tiempo, que las cosas se relajen, que sea más agradable la convivencia. Hago esto, porque no quiero estar mal contigo, no quiero que las cosas exploten y terminen peor. Prefiero que sea así, a que sea sin remedio. Quiero seguir queriendo verte.

Te amo; con gran parte de mi corazón. Cuando tú sufres, yo sufro el doble. Cuando a ti te duele, a mí me duele cinco veces más. Cuando tú ríes, yo río. La idea de hacerte daño, me parte el corazón, de verdad. Siento que soy nada más que mucho dolor para ti, siempre te decepciono, siempre te hago daño. Y lo que me da más pena es que sé que me sigues queriendo por sobre todo, que sé que tú no me ves de aquella forma.

Ojalá puedas disculparme algún día por ser tan egoísta, pero de verdad creo que si seguimos así, llegaremos tarde o temprano al quiebre y eso es lo último que quiero. Te amo; ya te echo de menos.

18.5.10

En caso de depresión y/o día de mierda: LEA.

¿Te has preguntado alguna vez: "¿Por qué seguir adelante, si no lo vale? ¿Por qué mejor no me quedo hoy en cama escuchando música triste mientras me pregunto por qué mi vida tiene que ser así?"?

Pues, yo creo que todos lo hemos hecho. Es en esos casos cuando conviene ver al lado. Tal vez te preguntes por qué tu vida no puede ser tan perfecta como la de aquella persona. Te cuento, mi amigo, que esa persona tiene problemas como tú. Tal vez no sean tan grandes como que tus viejos se divorciaron, que la polola te pateó, que te pusieron el gorro, que el profe te tiene mala...

Quizás es tan simple como que quiere un delineador de mejor calidad, o tal vez el perro se le enfermó o puede que justo cuando quería comerse las galletas de la alacena se dio cuenta de que se le habían adelantado (eso SÍ que molesta).

Pfff, problemas simples, ¿cierto?

Pero hay veces en que pasa lo contrario. Te das cuenta de que todo no va tan perfecto como se aparenta. Te das cuenta de que tus problemas no son nada comparados con los del vecino...
Hay veces, en cambio, en que vemos a alguien a quien creemos ser feliz, pero si te aventuras y lo conoces mas, te preguntas: "¿Cómo puede ser como es, cuando ha pasado por lo que ha pasado?"

Son esas personas las que me inspiran y deberían inspirarte a ti a seguir adelante, aunque todo parezca derrumbarse. Son esas personas a las que vale la pena seguir el ejemplo cuando te sientes miserable. Son esas personas a las que, cuando conoces, NECESITAS querer; es casi involuntario. No por el hecho de que sean fuertes, sino porque se lo merecen. ¡Que no se malinterprete! Obviamente que también se vale querer al resto.

Bueno, al grano. Cuando tu ánimo esté más abajo que el inframundo, y tu autoestima esté al mismo nivel... No te auto-compadezcas. Da vergüenza ajena, en serio. En aquellos casos escucha la canción que más te alegre, que más te inspire. También puedes descargarte escribiendo, dibujando, tocando algún instrumento. No dejes que te atormente lo malo que te ocurra. Ventílate, deja que se te olvide. Júntate con algún amigo que te haga reír o ve alguna película que te fascine. Obvio que también se vale llorar un rato, pero no hay que hundirse en ello sino te vuelves miserable.

Y sí, todas las cosas pasan por algo. Incluso las malas... Pues, si lo piensas bien, no habrían cosas buenas si las malas no existieran. Las cosas malas hacen que aprecies más los buenos momentos, las buenas experiencias.

Como dicen los estadounidenses: "Si la vida te diera sólo agua y azúcar, la limonada sabría horrible." Supongo que se entiende lo del azúcar, el agua y los limones, ¿no?

Hay veces en que crees que la vida te da sólo limones y agua, pero hay que saber apreciar los buenos, aunque a veces cortos, momentos dulces. Disfrútalos a concho, nunca sabes cuándo podrían acabar. ¡Y no hablo sólo de amor! Sino de un delicioso café con un amigo, una salida a bailar con tu mejor amiga, la tibieza de la cama cuando te despiertas, el excelente ritmo de una buena cancion, el simple aire puro.

En fin, DISFRUTA.

Nota Para Chicas En Búsqueda De Acción.

Salida de un viernes por la noche con tus amigas. ¿Para qué tanto arreglo, cambio de ropa, maquillaje, etc.? Porque queremos estar lindas, sólo para ellos. Nunca se sabe cuando conocerás a tu media mandarina.
I ntentamos no hacer el ridículo para que no piensen mal de nosotras. Bailamos lo más sexy que podemos para que nos saquen a bailar y, si tenemos suerte, conocer algo más que su nombre, edad, y sabor de saliva (no necesariamente en ese orden).
Pero, ¿qué pasa si no te sacan a bailar? Usaste cada paso sexy que te sabías y aún así nada de nada. ¿Serás tú? Quizás se te corrió el maquillaje y tienes el rímel marcando por completo unas inexistentes ojeras. Le dices a tu amiga que vayan al baño y ella acepta sin chistar, pues piensa lo mismo que tú. Te ves en el espejo y estás estupenda, aunque no lo crees por completo, pues por algo no te han sacado a bailar. En una de esas tu ropa no te queda bien…


Claro que no. Es tu conjunto favorito que además, fue aprobado por tus amigas. Entonces, ¿qué anda mal? Mientras vuelves a la pista te preguntas si tus pasos fueron demasiado exagerados o quizás muy tiesos. En una de esas no te han sacado por tu amiga… Fíjate en la pareja de al lado y notarás que la chica no es la más linda que haz visto en tu vida.
Nada va mal contigo o tu amiga… Es que se nota que quieres que algo pase. Te brota por cada poro de la piel. Los hombres, por alguna extraña razón se dan cuenta de eso. Ni idea de cómo lo hacen (y se quejan de que nosotras somos las raras), pero lo hacen.
Lo más recomendable para evitar aquellos casos: simplemente pensar que nada pasará, que será una salida con amigas y ahí va a quedar. Créeme que cuando realmente esperas nada de la situación, todo puede pasar (sí, chicas, la casi escasa experiencia ha hablado). Porque en verdad…
¿Para qué tanta wea? Si los locos igual se quedan con las más putas, poncias, perras, la que sí o sí le va a poner el gorro, la feita, etc… ¡Siempre las que MENOS les convienen! Y se quejan de que nosotras nos quedamos con los chantas o con los que nos hacen sufrir. CACA. Mi simple y cierta conclusión: las putas siempre ganan, ¿cierto kathe?
No, pero ya en serio… Chicas, que SIEMPRE sea para el rato. Si la cosa da para más y el mushasho en cuestión es un buen partido, un weón tela, que te quiera, que se preocupe por ti, que siga para más. Si no, mala cuea. Él se pierde LA oportunidad de su vida. Igual arréglate, nadie quiere a una cholita (en buena)… Aunque conociendo algo a los hombres…, probablemente sí. Ya, mira… Si te da más confianza, arréglate. Sale, perrea con tus amigas. ¡Hasta abajo, hasta abajo…! Perdón, me deje llevar.


A ver, en resumen de lo que iba en serio: Si te hace sentir mejor contigo, con más confianza o algo así, arréglate; pero siempre recuerda que las apariencias no lo son todo, quizás a los hombres les gusten las maracas, pero no les dura mucho la cosa con ellas. Y lo más importante, pásalo bacán, que cuando menos lo esperes esos gajos que forman la otra mitad de la toronja van a aparecer.